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Escuela Taller de Actores Titiriteros
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Taller integrado

Por Elvio Villarroel


"Yo soy como soy
Como todos me conocen
Nadie puede hablar mal de mí
Soy humilde respetuoso y de gran corazón
No dejo que nadie se meta en mi vida
Tampoco me agrando,
Solo que actuó tal como soy
Simple y natural
No me complico

Simplemente sonrió y voy hacia delante".

Rubén Darío Rivarola
(alumno del Taller)

Desde mi posición de Coordinador de la Escuela Taller Municipal de Actores Titiriteros, y luego de haber transitado diferentes experiencias en mi condición de titiritero, me hice el planteo de que la Escuela Taller debía realizar una tarea en el campo de la discapacidad, en razón de que el accionar de nuestra institución, se debía volcar a la sociedad integra sin discriminación alguna, sin olvidar que en nuestra sociedad existen las personas con capacidades diferentes, por que el olvidar es una de las tantas formas de discriminación. De esta forma y con la importantísima colaboración de la profesora de Expresión Corporal de nuestra escuela Susana González organizamos el Taller Integrado para personas de capacidades diferentes hace mas de tres años. Este taller fue pensado fundamentalmente desde el arte en sus diferentes expresiones y con relación a los seres humanos. Partiendo mejor dicho utilizando, diferentes dimensiones artísticas ( títeres, plástica, expresiones corporal ) y tomando al tallerista, en su calidad de individuo en tanto ser social, se pretende crear un lugar esencialmente humano, priorizando en el conceptos como participación, autorrealización, autoestima y en campo propicio para la potenciación de estados de salud. Es decir que la idea generador o la base de la instrumentación de este taller, no por la discapacidad, sino de las capacidades parciales pero efectivas de los futuros participantes. Desde que comencé mis experiencias utilizando el arte de los títeres con personas de capacidades diferentes, mejor dicho al poco tiempo de iniciar las mismas, me plantee esta cuestión y así fue que era muy diferentes el animo y la forma de encarar la tarea, cuando lo hacia desde la idea y la sensación de que debía tratar con discapacitados que cuando lo hacia desde la aventura, diría yo, de encontrarme con personas de muy variadas formas de capacidades e ir descubriéndolas, haciéndolas resaltar trabajando con ellas. Son dos posturas o actitudes diametralmente diferentes en la forma de encarar la relación especial como la que tratamos. Ello ocurrió primero en la Colonia Vidal Abal de la ciudad de Oliva, provincia de Córdoba, en Argentina, en el año 1973, durante el lapso de un año, una vez a la semana. Luego en la Colonia Montes de Oca, provincia de Buenos Aires, donde desarrolle mis actividades juntamente con otros profesionales : artistas plásticos, músicos, actores, contadores de cuentos y de expresión corporal. Este grupo al poco tiempo de concurrir a la mencionada Colonia se autodenominó Grupo Grato y desarrollo su actividad durante seis meses, concurriendo, tres veces por semana, con resultados totalmente satisfactorios, cuyo análisis y comentario necesita de un examen especial, motivo de otro trabajo.

Volviendo de nuevo al taller era nuestro propósito el crear un lugar esencialmente humano no es posible dejar de la lado la ética, sobre la base de la cual y los demás principios indicados se levantaría, la estructura de esta experiencia. Mediante la organización de este espacio de trabajo, se pretendía aun que fuera en muy pequeña medida dar solución al problema de la desvalorización, el abandono espiritual quizás o en definitiva al discriminación de las personas participantes del taller.

La situación de las personas con capacidades diferentes, como así sus falencias, su mayor o menor grado de salud no podían definirse, sino dentro del campo político cultural que los determina y condiciona.

La demarcación de los aspectos indicados en el párrafo anterior, y su valoración, depende de su relación, con todo el resto de la vida cultural, de los valores existentes en la sociedad, de las formas, pautas, normas de las relaciones humanas en un momento histórico determinado.

En el sentido de lo que vengo exponiendo, me permito transcribir un párrafo del trabajo titulado " Evaluación de la Experiencia del grupo Grato en la colonia Montes de Oca que la psicóloga Lilian Viviani, escribiera en su oportunidad y que textualmente dice "... tanto la medicina como la psicología tienen perspectivas reduccionistas, son necesarios enfoque multidisciplinarios, dispositivos mas elásticos, tomando un perfil a seguir. Se trata de abrir nuevos caminos para pensar la salud mental y la enfermedad..." Coincidiendo plenamente con lo expuesto anteriormente como lo expuesto anteriormente y en esta tarea de abrir nuevos caminos, tanto con relación a experiencias anteriores, como al implementar el Taller en nuestra escuela tuve como fundamento de dicha iniciativa en poner el acento en el amor, el afecto, la compresión, que debía estar presente en toda palabra, todo gesto, para contrarrestar las agresiones leves o graves, queridas o no queridas a que se ve sometido así constantemente quien no tiene la totalidad de las capacidades que la sociedad y el entorno pretenden,

En este sentido rescato el enorme valor que tienen los dos primeros párrafos del poema ( encabezamiento de estas líneas) escrito por Rubén Darío Rivarola, participante de nuestro taller desde hace tres años y que dicen " Soy como soy, como todos me conocen..." este llamado, esta exigencia de ser respetado, valorado en su integridad humana, en su dimensión existencial, en su calidez, en su sensibilidad, debe ser el presupuesto, la obligada premisa de todo aquel que por las más diversas causas se encuentre en su contacto. He aquí la clave de la solución de numerosos problemas y que nos abre diversas arcas de análisis al respecto.

Tenemos en primer termino ( en muestro caso) al hogar allí estos principios fundamentales del amor, el respeto, la comprensión, la tolerancia, desafortunadamente no tienen vigencia, el peso que debieran tener, de allí la necesidad de comenzar por aquí a plantear la necesidad de crear, allí también el espacio esencialmente humano, en el que la persona con capacidades diferentes no sea sometida al reproche o quizás al castigo y el aislamiento o cuando meno no se constituya en la vergüenza de la casa.

Por cierto que este es un problema difícil abordaje y aun más difícil solución y no voy a entrar en su análisis por que no me creo capaz de hacerlo. Lo que sí debo dejar planteada es la importantísima y urgente necesidad de no soslayarlo y abocarse al mismo en su real y profunda dimensión.

En efecto en nuestro taller a pesar de la buena voluntad y algunos intentos realizados, no se ha tomado un verdadero contacto con los hogares de los concurrentes al mismo, solo tenemos algunas noticias acerca de la situación reinante en ellos. Considero en consecuencia indispensable que todo aquel que este de alguna manera ligado a las personas con capacidades remanentes debe relacionarse con el hogar trasponer sus puertas y prolongar en el mismo, o por lo menos crear la inquietud de esta brega por darles una digna calidad de vida, en definitiva ese espacio esencialmente humano donde como dice Rubén " soy como soy, como todos me conocen..." pero con la mayor felicidad posible, con la mayor alegría de vivir posible.

Quiero destacar que CADEDIS ( Casa del Discapacitado de Avellaneda ) de donde concurren nuestros talleristas, realiza ya esta tarea, con muy buenos resultados, lo cual no ha eximido en gran medida de nuestra obligación es este sentido.

Tenemos por un lado la somera historia de cómo se organizo el taller, los principios que los sustentan, la forma en que se desarrolla etc. Ahora corresponde acercarnos a los talleristas, como acceden a nuestro taller y demás circunstancias. Para ello necesito hacer algo de historia. Cuando aun no participaba CADEDIS, se hizo una promoción en diarios, volantes, gacetillas etc. De este taller integrado para personas con capacidades diferentes. Lo de integrado, se refería a que al mismo tiempo podían concurrir los padres, con los hijos de capacidades remanentes, fue reducido el número de participantes pese a los esfuerzos realizados, además la participación de los padres que fue nada mas que de dos acompañando a sus hijos respectivos, creo desde el principio, el problema de la prolongación de los códigos y relaciones hogareñas al taller ( sobreprotección, autoritarismo etc. ) que incidían negativamente en el desarrollo de las actividades y además en la falta de regularidad en la concurrencia, nos llevo a replantear la estrategia diferente. De allí pues que en conocimiento de la existencia de CADEDIS y entabladas las conversaciones y relaciones pertinentes, de común acuerdo organizamos este taller. En primer término, determinamos el número de 15 a 16 talleristas que a nuestro entender y por nuestras mutuas experiencias era conveniente para el desarrollo óptimo del mismo. Luego nos planteamos en que forma se determinaría, cuáles de los concurrentes a CADEDIS, vendrían al taller. Así fue que concurrimos a la sede de la Institución realizamos una función de títeres, mostramos diferentes tipos de muñecos, se los entregamos a los espectadores, haciendo una muy corta historia de los mismos y les comunicamos la creación del taller, notificándoles que podían concurrir al mismo. De esta manera con absoluta libertad, se manifestaron los que querían hacerlo. Aquí quiero destacar un aspecto importante en nuestra relación con lo talleristas, y es la libertad de elegir que ellos tienen. Como digo desde el principio ejercitaron esa libertad y luego la siguieron ejercitando porque no están obligados a la concurrencia y así es como en el transcurso de los tres años del taller algunos han dejado de participar otros se fueron incorporando.

Pues habiendo establecido como principio de nuestra tarea el crear " un espacio esencialmente humano correspondía que dicho espacio no fuera un espacio vacío, ni un espacio caótico, donde existiera lo humano por lo humano mismo, sino con que llenar y como llenarlo. En primer término, la actividad artística, la esencial categoría de la belleza, debía estar presente en ese espacio, debido que en el mismo se utilizarían las disciplinas artísticas de títeres, expresión corporal y plástica, con sus lenguajes específicos y diferentes. El paso siguiente consistió en determinar cual era la dinámica a desarrollar. Si cada una de las artes antes mencionadas o si alguna tuviese preeminencia sobro las otras etc. En ese aspecto llegamos a la conclusión que debía trabajarse en estrecha interpelación, con armónica complementación, de tal manera que sus específicos lenguajes se utilicen con la conciencia de ser dirigidos al ser humano total con pareja intensidad y mutua comunicación. Como consecuencia de lo dicho precedentemente, surgió la necesidad de saber cual era, a nuestro entender, desde nuestra óptica, ese ser humano total, con el que íbamos a interactuar. Pues bien para mi lo era, cada uno de los participantes del taller con sus capacidades, sus discapacidades, su nivel intelectual, sus posibilidades y sus imposibilidades, valores de la vida y del espíritu que los nutra, principios de libertad y de orden que sustente en la medida de cada uno, poderes creadores que porte, inclinaciones primarias etc. Sin olvidar en esta concepción, el medio social y entorno, en que esta inmerso cada ser.

Por cierto que no se pretende en el taller sacar actores, pintores, danzarines ni titiriteros, sino tratar de mejorar la calidad de vida de los participantes, acrecentar sus capacidades remanente en la medida de lo posible, par que como personas estén mejor preparadas para enfrentar la existencia. En este sentido se ha explicado anteriormente que no se pone el acento en lo terapéutico, pero ello no impide que se obtengan resultados de esa naturaleza. Sirve para abonar esta aseveración por analogía, lo que dice la psicóloga Lilian Viviani en su informe y a citado a saber "... La interacción entre pares y con nosotros es un aspecto terapéutico fenoménico, que da un marco contenedor y segurizante, apto par fomentar la formación de hábitos que se establecen en interacción afectiva y corporal, en un ambiente de maternaje terapéutico...". Todos los concurrentes a nuestro taller mostraron algún avance en alguna de las áreas. Como elemento común a todos podemos decir que hay mayor comunicación y muestra de afecto entre si, mayor capacidad par expresarse, ya sea verbal o corporalmente mayor facilidad par integrarse en los juegos, actividades plásticas o proposiciones de improvisación que les formule, como así mayor disponibilidad y entrega de su cuerpo en expresión corporal.

En relación a la utilización del títere en nuestro taller tiene diversos aspectos y connotaciones que solo pueden detallar en un trabajo mas extenso y profundo, no obstante en apretada síntesis diré: En primer término cabe aclarar que no se trato específicamente de utilizarlo con un fin terapéutico. Se lo ha utilizado de la misma manera que a la plástica y expresión corporal con objetivos muy amplios par a crear condiciones que ayude a los talleristas a ser personas que puedan estar mejor preparadas para enfrentar la vista de acuerdo a sus posibilidades. En consecuencia, para evaluar la tarea desarrollada con los títeres en el taller habría que efectuar un detenido seguimiento de cada uno de los participantes, pero en honor a la brevedad, consignare que en general se ha conseguido avances en la comunicación natural y se restableció comunicaciones interrumpidas, se aumento la capacidad de atención, adema se acentúo la interacción entre pares y con nosotros. Se consiguió ampliar el afecto entre sí y que desplegaran su afectividad con menos descontrol, un mejoramiento en el lenguaje, y por último una disminución de su pasividad, y en consecuencia una calidad e intensidad acentuada en la participación.-

En conclusión la utilización del arte en todas sus formas y de manera coordinada y concluyente para crear" un espacio esencialmente humano" partiendo de las capacidades parcial y efectivas constituye una forma especial y creativa de encarar la problemática de las personas con capacidades diferentes.

Pero no solo me limito a consignar nuestra experiencia sino que exhorto y pido se concreten similares emprendimientos en las formas y lugares más diversos, valorizando el arte en toda su extensión, y promoviendo una participación más intensa y extensa posible de la sociedad en general, en este sentido y de los artistas, instituciones, padre etc. en particular.

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ULtima Modificacion: 24/04/08